

Y resulta que todo era mentira. Pero cuan ingenuos fuimos (somos y seremos). Resulta que ni llegué a este mundo volando desde París, ni mi copiloto era una cigüeña, ni siquiera la pude dar la más mínima instrucción respecto de adonde me llevara. ¡¡¡ Y yo desarrollando una inútil simpatía-agradecimiento por el buen ojo que creí que tuvo en la elección !!!. Resulta que los Reyes Magos no me visitaron nunca, ni leyeron jamás ninguna de mis afanosas cartas, ni venían con hambre, ni degustaban los vasos de leche ni las galletas que les dejaba, ni vieron jamas mis calcetines ni mi árbol de navidad, ni venían de extremo oriente, ni nada y, últimamente, voy y me entero que ni siquiera eran tan exóticos, que eran andaluces; paisanos vamos.



Resulta que ni siquiera es del todo exacto aquello de que "en este mundo traidor, nada es verdad ni es mentira; todo es según el color del cristal con que se mira". Es más, si alguien te dice que no miente nunca te está mintiendo descaradamente.
Resulta que nacimos entre mentiras, crecimos entre ellas y, probablemente, nos acompañaran hasta el final de nuestros días. Aprendimos a dudar de casi todo según íbamos descubriendolas y fuimos (somos y seremos) extraordinariamente ingenuos. Bastaba que alguien, nuestros padres o educadores por ejemplo, o algo, la tele o la moral, nos dijera cualquier cosa y, como gozaban de nuestra confianza, los creíamos a pie juntillas. No se coge antes a un mentiroso que a un cojo. Si es mentiroso profesional, no; se corre menos, eso si, pero si es profesional, se coge tarde.

Este es el listado de las mentiras... que sin duda todos, absolutamente todos hemos usado alguna vez:
1. Este año si me pongo a estudiar.
2. No te va a doler.
3. Una mas y nos vamos.
4. Solo veo si tengo algún correo y me desconecto.
5. Nunca vuelvo a beber.
6. ¿Que yo te debo? Ni me acordaba.
7. Pero agente ... si pasé en amarillo.
8. Págalo por favor, y mañana te lo devuelvo.
9. Se me perdió tu teléfono.
10. Es que me busca. Yo no le doy pie a nada.
11. Justo estaba pensando en ti...
12. Solo somos amigos.
13. Se cayo solo y se rompió.
14. Te estuve llamando pero sonaba ocupado.
15. Llego en 5 minutos.
16. Te juro que nunca lo pensé.
17. Llámame luego que ahora no puedo atenderte.
18. Pero si estaba allí, es que no nos vimos.
19. Ayer soñé contigo.
20. Pensé que era mañana.
21. Se cayó el servidor.
22. Se fue la luz.
23. Tranquilo, yo te llamo.
24. Ya estaba así cuando llegué.
25. Yo nunca digo mentiras.
26. De verdad. La puntita, nada más.
27. Es la primera vez que me pasa...

Mark Twain alguna vez dijo, una mentira puede darle la vuelta al mundo antes de que la verdad tenga tiempo de ponerse las botas. ¿O fue Winston Churchill quien lo dijo? ¿O fue Groucho Marx? ¿O el autor británico Terry Pratchett? Internet lo decide. Es probable que todos los mencionados hayan parafraseado este antiguo proverbio si lo buscas en internet, lo cual nos lleva a ¿es cierto todo lo que podemos leer en la pantalla del ordenador cuando buscamos algo en internet? Decididamente no. En un estudio de la Universidad de Stanford de tuits producidos tras el terremoto en Chile en 2010, alrededor del 96% de los mensajes que contenían información fidedigna fueron posteriormente "afirmados" por usuarios, mientras que menos del 50% de los rumores falsos fueron "negados" Esto dice mucho de la voluntad humana y del afan que ponemos en nuestros actos. Internet es un lugar donde los rumores y mentiras corren a gran velocidad. ¿Os acordáis del turista a punto de morir en las torres gemelas?. El tipo de pie en el World Trade Center con un avión detrás de él a punto de chocar, supuestamente. Pues bien, la fotografía es del 9/11. Esa foto se propagó por Internet rápidamente y todavía hoy está dando vueltas. Al final resultó ser un engaño, pero mucha gente se creyó y cree hoy día que es real.
Ahora me coloco en el papel de varón heterosexual (un tanto jodido diréis vosotras) y proclamo:
- que no todas las que dicen ser vírgenes resultaron serlo efectivamente
- que cuando una mujer te dice ¿como?, te ha escuchado; lo que pasa es que te está dando tiempo para que cambies el relato
- que a las mujeres no les duele tantas veces la cabeza; seria inaguantable
- que si una mujer no recuerda algo es porque la conviene
- que si se autoproclama como no celosa, es casi peor; estas con una celosa mentirosa, que lo sepas
- que si un día decide montarselo con otro, nunca te vas a enterar; son mucho mas inteligentes que nosotros, así que mejor no andes con fantasmas en la cabeza
- que siempre les va a fastidiar que tu no te actives cuando ellas estan dispuestas aunque te muestren su lado más maternal y le resten importancia
- que algunos de sus amigos gays las ponen aunque no lo reconozcan
- que eso que ves puede no ser real. Existen uñas y pestañas postizas, siliconas, fajas, maquillajes, tintes, depiladoras, botox, rellenos, perfumes, tacones, extensiones ....
Pero eso si, siempre preferirán a un hombre sincero. Si te pillan en la más mínima utilizarán esa información de por vida y nada de lo que digas a partir de entonces resultará una realidad clara y diáfana. Tus palabras se pondrán en cuarentena inevitablemente y todo por un "si, si ya voy para allá"

Resulta que con los condones no se tiene sexo seguro, se tiene sexo saludable cuando se tiene pero nada más. Algunos/as se compran cajas y cajas de preservativos creyendo que con eso está todo hecho y siguen sin copular. Porque nadie tiene la seguridad plena en este acto, ni la mas bella y díscola dama, ni el mas apuesto y acaudalado caballero. Resulta que es posible fingir un orgasmo, incluso masculino; que las palabras no se las lleva el viento, en el amor no por lo menos; ellas te las recordaran machaconamente durante toda una vida. Resulta que no siempre se valora mucho más la inteligencia que la belleza. Resulta que nuestros novio/as no eran tan alegres, amorosos/as, sociables, considerados/as, cultos/as, sinceros/as y maravillosos/as como parecían; que, aún a



Resulta que no había que preocuparse por los regalos y dádivas que te proporcionaria la vida con un poco de suerte. Resulta que esa suerte no existe; existe el azar, la casualidad y si me apuran el destino pero no la suerte entendida como la conjunción de todas las situaciones y condiciones necesarias para el éxito. Resulta que en lugar de preocuparnos por lo que se nos pueda dar sin esfuerzo alguno había que preocuparse por lo que estamos dispuestos a poner en juego e implicar en nuestras vidas porque lo que nos ocurre es más fruto de nuestras propias acciones que de otra cosa. El hombre, como dijo Ortega y Gasset, es el hombre y sus circunstancias, pero las circunstancias pesan menos que el hombre mismo y se pueden (deben) cambiar.




Y que se puede decir mas de la mentira o el engaño. Si ya queda demostrado que algunas especies de animales, las mas inteligentes, son capaces de mentir en provecho propio. Se ha comprobado que determinado grupo de primates (mono araña, mono ardilla, mono aullador y capuchino) dan falsas llamadas de alarma que indican la presencia de depredadores para ahuyentar a los compañeros y poder así comerse a solas los alimentos que otros encuentran y que dejan abandonados por temor a ser devorados. Es decir, manipulan lo que otros piensan en un momento dado mediante la mentira, una capacidad difícil de encontrar en otros primates no humanos y que prueba la enorme inteligencia de estos animales.Hay quien dice que 'Una mentira que te haga feliz vale más que una verdad que te amargue toda una vida'. Se viene llamando mentira piadosa y es necesaria. Eso si, en contadas y justificadas ocasiones. Por otro lado, no todo el mundo tiene la inteligencia emocional

